En el Reino Unido, la incidencia del cáncer oral sigue aumentando, con un incremento del 60% en los últimos 10 años. En muchos pacientes se diagnostica la enfermedad en estado avanzado, lo que a menudo da lugar a una recidiva locorregional y mal pronóstico, lo cual no ha cambiado significativamente desde hace más de cuatro décadas. También parece que se observan cambios en la etiología, dado el descenso del consumo de tabaco en los países desarrollados. Por tanto, se necesitan nuevos métodos para orientar mejor la prevención, el cribado y el diagnóstico de las recidivas. Las tecnologías "ómicas" de alto rendimiento parecen prometedoras para el futuro diagnóstico y pronóstico a nivel individual. Sin embargo, dado que se trata de un cáncer relativamente raro con una importante heterogeneidad intratumoral y variación en la respuesta de los pacientes, ha sido difícil dilucidar biomarcadores fiables. Desde el punto de vista de la salud pública, la implementación de estas nuevas tecnologías en los servicios actuales requeriría importantes consideraciones en la práctica clínica, financieras y éticas. Esto puede ser difícil de justificar e implementar en la actualidad, por lo que la atención sigue centrada en la detección precoz mediante nuevas estrategias de seguimiento dirigidas por el paciente. En este artículo se revisan los datos más recientes sobre las tendencias epidemiológicas del cáncer oral para ayudar a identificar los grupos de riesgo y los enfoques poblacionales de prevención, además de los posibles enfoques de vanguardia en el diagnóstico y el pronóstico de esta enfermedad. Palabras clave: Epidemiología, cáncer oral, supervivencia, factores de riesgo, carcinoma de células escamosas, neoplasias bucales